Disertación Unidad 3 Filosofía - El ser humano y el sentido de la existencia -

 

¿Qué relación hay entre la mente (alma) y el cuerpo?

¿Qué es el ser humano? ¿Acaso esta pregunta tiene una respuesta como tal? Bueno pues, biológicamente, ser humano es una expresión que hace referencia al Homo sapiens, cuya principal característica es la del razonamiento y aprendizaje (entre muchas otras), y eso es lo que les hace diferentes de otras especies.

Por otro lado, se conoce como ser humano, a todo lo que es perteneciente al hombre o parte de él. La palabra humano proviene del latín "humanus", formada por "humus" que significa "tierra"; y el sufijo"-anus", que indica procedencia de algo.

Pero.... y en el sentido filosófico, ¿el ser humano tiene una definición? La verdad es que en parte sí, y en parte no, dado que dependiendo de tus ideales y tu forma de ver el universo, la respuesta puede variar ya que dependiendo de tu visión acerca del origen del universo, la finalidad del ser humano también cambiará.

Lo que si sabemos, es que el ser humano, está dividido en 2, por un lado, se haya el cuerpo (conjunto de todas las partes materiales que componen el organismo del ser humano y el animal), y por otro, el alma (entidad abstracta considerada la parte inmaterial que, junto con el cuerpo o parte material, constituye el ser humano).

No obstante, la definición de cuerpo y alma, varía de acuerdo a la perspectiva filosófica de quien haga referencia al término, y eso es lo que veremos hoy, las diferentes perspectivas que tienen ciertos filósofos sobre estos dos términos.

Entre ellos, se encuentran Platón, Aristóteles, San Agustín y Santo Tomás, los cuales nos ofrecen aspectos muy interesantes y diversos sobre el cuerpo y el alma  del ser humano.


Empezando con Pláton, discípulo de Sóctates, el considera al ser humano como un conjunto irresoluble de alma y cuerpo, donde la primera está encarcelada en la segunda.Además él, divide la realidad en dos mundos distintos; por un lado, encontramos el mundo de las ideas, el cual es inmaterial, perceptible por el entendimiento y eterno, en el que se encuentra el alma al considerarla como espiritual.

Por otro lado, encontramos el mundo sensible, aquel que es material, perceptible por los sentidos y sometido al cambio, en el que se encuentra el cuerpo como sustancia material.

No obstante, Platón atribuye mayor primicia al alma que al cuerpo ya que este asegura que es el principio del movimiento y del conocimiento, y que además, la divide en 3 partes: alma racional; a la que se le atribuye la sabiduría, es inmortal y la más noble; el alma irascible, en la que se encuentra el valor y la voluntad y contiene la virtud de la fortaleza, y por último, al alma concupiscible, en donde se encuentran las pasiones y cuya virtud es la templanza. El ama racional tendrá que guiar a estas dos almas para que la voluntad se mantenga fuerte y evitar que se desaten las pasiones.

Aristóteles por otro lado, era discípulo de Platón y compartía con él la idea del conocimiento objetivo y que este, era posible ser alcanzado, no obstante, nos ofrece una justificación muy novedosa ya que este se justifica basándose en la observación de todos los seres vivos.

El divide el alma en tres tipos: la vegetación, la sensación y la intelección. La primera, se la atribuye a las plantas, la segunda a los animales y a los humanos, y la intelección, se la otorga únicamente al ser humano, ya que este es el único que contiene la capacidad intelectiva, en donde el hombre sabio, era el prototipo de hombre feliz.

Por otro lado, Aristóteles decía que no existía más mundo que aquel que podía ser percibido por los sentidos, y que por tanto, el alma no podía estar encarcelada en el cuerpo, por lo que él define al hombre como una unidad sustancial entre cuerpo y alma.

San Agustín por su parte, estaba de acuerdo con la mayor parte de los ideales de Platón ya que este tenía influencia platónica, no obstante, de lo único que no estaba de acuerdo, era la negatividad del cuerpo y la afirmación de que el alma era eterna.

Por un lado, y refiriéndose a la negativa del cuerpo, él decía que todo estaba creado por Dios, y que todo ello, era algo bueno, por lo que el cuerpo, al ser resultado de la creación del Señor, este no podía ser considerado como la cárcel del alma, sino que el cuerpo, era un don de Dios.

Por otro lado, San Agustín decía que el alma nunca había preexistido en ningún lugar por lo que lo único que podía ser eterno, era Dios. El alma podía ser inmortal, pero no eterna.

No obstante, no supo dar argumentos de cómo Dios crea el alma de cada persona, por lo que lo solventó, ofreciendo un análisis del alma y de sus operaciones de una manera psicologista, ya que decía que la identidad humana estaba constituida por el alma, y que por ello, el yo, era la sabiduría para conocer, la voluntad para amar y la memoria para preservar, por lo que conocer, amar y preservar, eran las operaciones esenciales del alma. 

Por último, Santo Tomás, influenciado por Aristóteles, hará suya la definición de ser humano como unidad sustancial y por ello, la negativa del cuerpo quedará resuelta con argumentos racionalistas.

Relacionado con ello, él compartía con Aristóteles la idea de felicidad que todos los humanos poseen, en donde la inteligencia nos presenta lo que nos conviene y la voluntad decidirá llevarlo a cabo o no.

Por añadidura, Santo Tomás aseguraba que la única manera de conseguir la felicidad, era mediante la visión beatífica, es decir, gozar de Dios en el Cielo. Acerca de este punto, tanto San Agustín como Santo Tomás, estaban de acuerdo de que la finalidad del ser humano era alcanzar la visión beatífica.

En conclusión, y como podéis ver, no hay una única respuesta, argumento o un punto de vista para un tema, sino que al contrario, la cantidad de diferencias ideológicas sobre un aspecto, pueden llegar a ser incluso infinitas.

No obstante, esto, es algo realmente bueno, dado que de esta manera, puedes llegar a profundizar acerca de ese tema y descubrir qué es lo que verdaderamente piensas sobre ello, y relacionándolo con el cuerpo y el alma de una persona, dependiendo de cómo entiendas el universo, de donde procede, si este tiene finalidades, si es fruto del azar, si es el resultado de un proceso creador de Dios,etc, tus puntos de vista acerca de ser humano puede variar.

Ofreciendo mi opinión, ya estaría más de acuerdo con Aristóteles y con Santo Tomás en relación con sus puntos de vista sobre el cuerpo y el alma ya que pienso, que una persona no es ella misma sin su cuerpo ni sin su alma, todo en uno, puesto que si el humano no estuviera compuesto por estas dos sustancias las cuales dependieran una de la otra, esa persona no estaría "completa".No tendría su esencia propia, lo que le hace ser diferente y único de los demás.